Desde hace cuatro años, Santa Marta emprendió una campaña agresiva para la reducción y control del consumo de plástico de un solo con la campaña Desplastifica tu ciudad’, una de las iniciativas ambientales más importantes en Latinoamérica.
Gracias a esta iniciativa, el comercio formal ha retirado de sus estanterías los vasos, platos y cubiertos ‘desechables’; además, se han extraído más de 24 toneladas de residuos de plástico de un solo uso e icopor en las jornadas de limpieza de río y playa y dejaron de llegar 88 toneladas de plástico a los ríos, a los cerros y al mar, repercutiendo social y económicamente en la calidad de vida de los recicladores de oficio.
Ya en los restaurantes, almacenes de cadena y grandes superficies los clientes llevan sus propios talegos o bolsas reutilizables para depositar sus compras, mientras que los deportistas consumen agua en sus propios termos para no adquirir botellas pet.
Igualmente, se implementó el primer modelo público de economía circular de la ciudad por medio del proyecto piloto para el aprovechamiento de sintéticos de un solo consumo ‘Ecobotellas’, que promueve el llenado de botellas con residuos plásticos de empaques flexibles generados en los hogares, empresas de todos los sectores y escuelas, para transformarlos y reutilizarlos en la construcción de parques infantiles, mobiliario urbano y viviendas en beneficio de poblaciones vulnerables.
Gracias a “Desplastifica tu Ciudad”, los docentes en los colegios públicos y privados de Santa Marta se han convertido en dinamizadores y promotores de la importancia del cuidado de las fuentes hídricas, especialmente del río Manzanares, a donde llega una gran cantidad de residuos, desperdicios y desechos plásticos, los cuales terminan contaminando el mar de la Bahía de Santa Marta.
Uno de sus programas es la carrera DesplastifiK a tu ciudad, que realizó su cuarta versión hace unos días, donde participaron más de 7.000 personas y tuvo como eje central la lucha contra el plástico de un solo uso, logrando recolectar durante el periodo de inscripciones casi 300 mil botellas de ese material, equivalentes a casi 4 toneladas, evitando su disposición inadecuada sobre las principales fuentes hídricas del Distrito, especialmente el río Manzanares.
Este proyecto consolidó a Santa Marta como el primer ente territorial del país en la lucha contra estos elementos contaminantes.
Fuente: Fundación Amigos del Planeta.
