German Viasús, ingeniero sanitario y ambiental dice que una casualidad en una investigación que adelantaba con lombrices le permitió abrir la puerta para saber y entender el poder de los escarabajos. “Por alguna razón las lombrices que tenía en una cama de proceso se murieron y aunque abandoné ese estudio, de un momento a otro unas plantas que había dispuesto en el sitio comenzaron a desarrollarse de una manera sorprendente. Entonces revolví la tierra y encontré que quienes habían hecho ese trabajo de transformación en abono eran las larvas de escarabajo”.
Así nació Tierra Viva, un emprendimiento en el que 8 municipios de Boyacá le entregan sus desechos orgánicos a Germán para que sus larvas transformen en abonó 100 % natural.
Enlace: https://youtu.be/EpTYVDH68pk