El próximo 5 de junio el mundo celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, concepto complejo que encierra todos los factores que lo determinan y lo afectan así como sus causas predominantemente humanas.
Calificadas autoridades internacionales denuncian por ejemplo que los compromisos de los Estados suscritos en París, 2014 y Glasgow, 2021, entre otros, son ignorados o burlados por los propios signatarios en relación con temas que no dan espera como son la conservación de bosques, la gradual eliminación de combustibles fósiles y otros, proyectados al año 2030 y 2050.
Como consecuencia de ello, esas metas desde ahora se incumplen y es así como no solo se superaron los índices del calentamiento global sino que sería imposible cumplir con las metas acordadas para los años dichos.
Otro aspecto anotado por esas instancias superiores, alerta sobre la relación existente entre las deforestaciones causadas en el mundo por las actitudes depredadoras del hombre en su condición de agentes del mercado, las ganancias o los equilibrios financieros a nombre de los Estados o las empresas que ignoran las obligaciones universales adquiridas o las violan desde la legalidad o la ilegalidad. La explotación del petróleo o el carbón, las actividades mineras, lícitas o ilícitas, las industrias ganaderas o madereras.
Se sabe además que a pesar de los acuerdos y las investigaciones mundiales, la contaminación del aire y los ríos crece tanto como la acidez del agua oceánica y sus niveles, o el peligro de especies de flora y fauna (bosques nativos, especies en riesgo), tanto en el mar (arrecifes y corales) como en la tierra.
Son amenazas del hombre y sus empresas con la idea de producir ganancias a cambio de la vida total en peligro; los gobiernos deben saber que el mundo está enfermo.
Fuente: Fundación Amigos del Planeta.