Después de varios años de ausencia de la «fiesta brava» en la ciudad, un fallo judicial administrativo abrió las puertas para que la temporada taurina regrese a la capital colombiana en las condiciones habituales de su práctica.
El fallo anuló el Acuerdo 767 mediante el cual el Concejo prohibió el uso de picos, estacas y otros elementos que pudieran causar daño al toro en la corrida, ahora nuevamente habrán corridas sin límite en la violencia contra los toros y también invalida los artículos del Acuerdo que estipulaban que, al menos, el 30 % de la publicidad destinada a promover las corridas debía informar sobre el maltrato sufrido por los toros durante las faenas.
Con el fallo judicial, la plaza La Santamaría dejaría de tener ferias de emprendimiento y de arte y volvería a ser escenario de prácticas de tortura y matanza de toros.
Es lamentable que vuelvan a revivir las corridas de toros, la tauromaquia es un acto de tortura donde los toros son sometidos a prácticas crueles, llevándolos al límite del sufrimiento hasta causarles la muerte. Es una violación de los derechos de los animales, que son seres sintientes que merecen respeto y protección.
Fuente: Fundación Amigos del Planeta.
