Providencia, La isla caribeña en San Andrés, víctima del cambio climático y el año pasado, de los azotes furibundos de los ciclones de temporada, hoy enfrenta un destructor incendio que amenaza la flora y la fauna de la ínsula. Se ignora el origen de las llamas para las que las irresponsables manos del hombre no debieron estar ausentes, como acaso sí, las autoridades encargadas de prevenirlas.
Gorgona, isla colombiana del Pacífico, reserva ecológica universal y parque bajo la custodia del gobierno central, a lo largo del tiempo, ha sido víctima de fatales decisiones gubernamentales y de violaciones de la soberanía marítima. Hace unos años ese tesoro natural fue convertida en prisión para encerrar a peligrosos criminales, riesgo que superó con fortuna siendo en seguida convertida en isla de estudio y reserva por la riqueza única de su fauna marítima y terrestres y su vida vegetal. Hace poco, se intentó convertirla en base militar y hoy, destinada como centro de control para el narcotráfico internacional. Otro crimen ecológico que el gobierno debe revertir para bien del país y de la humanidad.
Fuente: Fundación Amigos del Planeta.
